Aprender de… la pintura de Van Dyck
El arte y la cultura que se desarrolló en occidente en el s. XVII se conoce con el nombre de Barroco.Los artistas de este periodo valoraban por encima de
La entrada de Cristo en Jerusalén – Van Dyck
todo la distribución de la composición y sus efectos. El Barroco está dominado por el movimiento, ya sea éste físico, emocional o espiritual.
Van Dyck (1599–1641) es un pintor barroco, como lo son también Vermeer, Nicolás Poussin, Rembrandt, Rubens, Murillo, Velázquez o Zurbarán.
Las obras de Van Dyck tienen principalmente una temática religiosa, plasmando las inquietudes e ideales de la época. Su pintura tiene un carácter dramático, conseguido con colores luminosos y fuertes contrastes entre luz y sombra.
El Museo del Prado acoge estos días una exposición temporal monográfica con la obra de este genial pintor. Bajo el título de «El joven Van Dyck», la muestra recoge sus dibujos y pinturas realizados antes de su partida a Italia en 1621. Todas las obras expuestas fueron realizadas por el pintor antes de cumplir 21 años.
Una parte importante de esta exposición son sus retratos. En la serie de retratos su dibujo es muy versátil, trazando figuras de pose elegante y fuerza expresiva en sus rostros, como si tratasen de entablar una conversación con el espectador. Van Dyck creó un estilo que señaló el comienzo de la gran tradición de pintura retratista inglesa.
Además, Van Dyck nos transmite en su dibujo su obsesión por captar el movimiento. Lo podremos apreciar en sus bocetos preparatorios y escorzos en distintas posiciones de la figura humana (bocetos que realiza para estudiar posibles distribuciones antes de llegar a la composición final en el cuadro).
Hasta el 31 de Marzo de 2013. Museo Nacional del Pradoo (28014 Madrid)
686 37 47 42
